Ripple y XRP:
la guía completa
¿Qué es Ripple? Ripple no es una criptomoneda en sí misma. En realidad, Ripple es una compañía privada que desarrolla una red de pago e intercambio llamada RippleNet. Con la tecnología de la Blockchain, el objetivo de Ripple es hacer que los pagos interbancarios sean más sencillos, rápidos y baratos. Uno de los servicios desarrollados por la empresa utiliza la criptomoneda conocida como XRP. El objetivo de Ripple implica colaboraciones con muchos actores que la compañía ha estado desarrollando durante años, incluyendo proveedores de servicios de pago y plataformas de intercambio de criptoactivos. Descubra todo lo que necesita saber sobre Ripple: historia, funcionamiento, futuro…
1. Historia de Ripple y XRP
Ripple fue diseñado en 2004 por Ryan Fugger, un desarrollador web de Vancouver, como un sistema monetario digital descentralizado. Primero se llamó RipplePay. La idea de Ryan Fugger era permitir que individuos y comunidades desarrollaran fácilmente su propia moneda virtual. El sistema RipplePay fue lanzado en 2005, siempre con la idea de ofrecer pagos seguros en todo el mundo.
En 2012, Jed McCaleb, de la red eDonkey y Chris Larsen, fundador de las compañías E-Loan y Prosper , se acercaron a Ryan Fugger para presentarle su idea de una nueva moneda digital, basada en un sistema de verificación por consenso entre los miembros de la misma red, y no en la minería, como el Bitcoin. Ryan Fugger les cedió las riendas de RipplePay. McCaleb y Larsen llamaron a la compañía OpenCoin. Su objetivo era claro: proponer soluciones de pago a bancos e instituciones financieras. Después, desarrollaron un nuevo protocolo de pago, basado en los conceptos creados por Fugger. Lo llamaron Protocolo de Transacción Ripple (RTXP).
A partir de 2012, inspirados por la creación de Bitcoin, los líderes de Ripple implementaron su propia blockchain para brindar servicios de intercambio en varios pares de divisas, además de para almacenar toda la información contable de los participantes de la red. La criptomoneda nativa de esta blockchain, XRP, se creó al mismo tiempo.
En 2013, OpenCoin cambió su nombre para pasar a llamarse Ripple Labs. La empresa lanzó numerosos proyectos, algunos de los cuales no llegaron a prosperar. Ripple Labs, por ejemplo, propuso Codius en 2014, cuyo objetivo era desarrollar contratos inteligentes. No fue hasta 2015 cuando la compañía empezó a llamarse Ripple.
La promesa de Ripple es la siguiente: permitir intercambios interbancarios seguros y verificados por los participantes de la red mediante un mecanismo de consenso. Todo esto en tiempo real con una solución de código abierto.
El 13 de junio de 2016, el Departamento de Servicios Financieros de Nueva York emitió una licencia de moneda virtual a Ripple. En octubre de 2017, la compañía estableció colaboraciones con cientos de instituciones financieras. La moneda virtual de Ripple, el XRP, es hoy una referencia en criptomonedas.
2. ¿Qué función tiene la criptomoneda XRP?
La XRP no es una criptomoneda como las demás. En este sistema, el token XRP no se utiliza como divisa de pago, sino como divisa universal de compensación. Pongamos un ejemplo para que quede más claro: cuando realiza transacciones internacionales, muy a menudo tiene que cambiar una divisa por otra, del euro al dólar, por ejemplo. Este sistema de transacciones entre divisas es caro y puede tardar varios días.
Con el protocolo de Ripple, primero cambia un euro por un XRP, luego un XRP por un dólar. Un mecanismo que simplifica las transacciones, las hace instantáneas y menos costosas. Veremos más adelante en el artículo que la utilidad de XRP no está exenta de controversia, porque el token no se utiliza en todas las soluciones propuestas por la empresa Ripple.
3. ¿Cómo comprar XRP?
Como particular, puede invertir en el token XRP desde las plataformas de criptoactivos que lo ofrecen, como Coinhouse. Pero tenga en cuenta que el hecho de poseer XRP no le otorga ningún derecho sobre la evolución del protocolo. Otro problema es que no puede disfrutar de la utilidad intrínseca del token XRP, ya que no utiliza la red Ripple. Un XRP no representa una parte del valor de la empresa, no otorga derecho de voto ni remuneración alguna. Por lo tanto, su compra tiene un propósito puramente especulativo. ¿Desea invertir en esta criptomoneda? Visite esta página para comprar XRP y descubrir todos nuestros consejos.
4. El futuro de Ripple y el futuro del XRP
Uno de los puntos fuertes de Bitcoin es el hecho de que no existe una autoridad central que pueda tomar decisiones unilaterales sobre la emisión de protocolos o divisas. Esa famosa descentralización conlleva una serie de ventajas.
Sin embargo, la compañía Ripple se otorga el derecho de vender en el mercado hasta mil millones de XRP al mes, lo que hace al menos en parte. Una parte se reserva para la venta a grandes clientes e instituciones, mientras que otra parte se vende directamente en el mercado. El hecho de que la mayoría de la criptomoneda de Ripple sea propiedad de unos pocos inversores influye en su cotización. Este detalle, lejos de ser trivial, merece ser tenido en cuenta: Ripple y sus principales inversores tienen poder real sobre el token XRP.
Por lo tanto, Ripple posee un control significativo sobre la política de emisión monetaria del token, mientras mantiene una fuente constante de ingresos a través de la venta de nuevas unidades en el mercado cada trimestre.
El potencial del XRP frente a la competencia cada vez mayor de otras criptomonedas puede plantear serias dudas. Seguro que la política monetaria del token XRP le llama la atención. Le aconsejamos que la tenga en cuenta y la comprenda bien antes de tomar cualquier decisión de inversión.
El primer punto a tener en cuenta es, sin duda, el número de tokens XRP existentes: 100 mil millones. Es una cifra extremadamente alta, sobre todo si se compara con los 21 millones de bitcoins. Pero, de estos 100 mil millones, en abril de 2021, sólo había 46 mil millones de unidades en circulación. Más de la mitad de las fichas están en posesión de Ripple. Como mencionábamos anteriormente en este artículo, este control sobre una gran parte de los tokens influye en el precio del XRP.
Esto causa, además, una escasez artificial de oferta en el mercado, que la empresa Ripple controla plenamente. Cuando la empresa vende una parte de estos tokens, es probable que disminuya el valor del token XRP, a menos que exista una demanda significativa al mismo tiempo. Además, el 70 % del número total de unidades está controlado por las 100 direcciones más ricas.
Por otra parte, aunque Ripple es una blockchain muy rápida, su funcionamiento plantea dudas. Las opciones de Ripple le permiten ofrecer una blockchain mucho más rápida que la de Bitcoin. Las transacciones XRP pueden validarse en menos de cuatro segundos, en comparación con una media de 10 minutos para Bitcoin. Se trata de una ventaja importante, pero que debe considerarse con prudencia: la noción de confianza en esta blockchain es muy relativa, puesto que todos los validadores están estrechamente vinculados a la compañía Ripple.
A diferencia de la blockchain de Bitcoin, la de Ripple no se basa en el algoritmo de consenso de la «prueba de trabajo» (Proof of Work en inglés). Tampoco se recurre a la minería para verificar las transacciones. La red funciona de manera diferente y alcanza el consenso utilizando su propio algoritmo. No se proporciona remuneración para operar la red y no es posible minar XRP: como hemos visto, los tokens son emitidos por la empresa Ripple.
La descentralización del proket también plantea dudas. Es posible ser un validador de la blockchain XRP sin pedir permiso a Ripple. Pero, una vez más, Ripple recomienda que sus clientes utilicen una lista de participantes de confianza identificados para validar sus transacciones. Esta lista se conoce como Unique Node List (o lista exclusiva de nodos). Dentro de esta lista, alrededor de la mitad de los nodos pertenecen a Ripple, lo que desafía fuertemente cualquier idea de descentralización del proyecto.
Ser un validador en la blockchain Ripple es muy restrictivo. Necesita tener un espacio mucho mayor en su ordenador en comparación con la blockchain Bitcoin. Ripple exige condiciones muy estrictas: ser capaz de mantener el nodo 24/7, integrar actualizaciones muy rápidamente y estar identificado. Todo esto limita enormemente a los participantes.
En teoría, por lo tanto, la blockchain Ripple funciona como un registro distribuido de código abierto, que puede perdurar incluso si la empresa dejara de existir y al que todo el mundo puede contribuir. En la práctica, la empresa ejerce un estrecho control sobre los validadores y, en última instancia, sobre todas las transacciones que pasan por la red. Ripple y su criptomoneda muestran ventajas innegables, pero es necesario reflexionar detenidamente antes de comprar o vender XRP.
En resumen, Ripple presenta ventajas e inconvenientes. Entre sus ventajas, se encuentran la rapidez de las transacciones, su alto nivel de seguridad y su bajo costo. Ripple también sirve como puerta de enlace entre las monedas reales y las monedas virtuales. Pero, frente a estas ventajas innegables, existen varios inconvenientes que deben tenerse en cuenta:
- Puesto que la criptomoneda es pre-minada, no ofrece ningún sistema de recompensa;
- El token XRP todavía no es ampliamente utilizado por el público en general;
- La centralización de Ripple le confiere un monopolio criticable.
El futuro de Ripple y XRP es complejo de predecir. La compañía ha sabido seducir a instituciones poderosas, como el Banco Nacional de Abu Dhabi, que ya utiliza XRP para realizar transacciones con cantidades exorbitantes. El token XRP se está convirtiendo en una de las tres mejores criptomonedas del mundo, justo por detrás de Bitcoin y de Ethereum. Sin embargo, la volatilidad del XRP sigue siendo un obstáculo para predecir su evolución a largo plazo. Puede resultar tentador comprarlos cuando el precio baja, pero varía demasiado como para garantizar un verdadero valor añadido después. Por lo tanto, es recomendable actuar con precaución, aunque el futuro de XRP parezca prometedor.
5. Comprender las soluciones proporcionadas
por Ripple
La red Ripple ofrece actualmente un paquete de tres productos, diseñados como una solución de sistema de pago para bancos y otras instituciones financieras. Estos tres productos principales son: XRapid, xCurrent y XVia.
xRapid
xRapid es probablemente el producto más interesante de recordar, porque es una solución de liquidez a demanda, que utiliza el token XRP como una moneda de transmisión global entre las diferentes monedas fiduciarias. El sistema proporciona tiempos de confirmación más cortos y costes muy reducidos en comparación con los métodos de transferencia convencionales.
Pongamos de nuevo un ejemplo para entenderlo: un banco español A quiere enviar 10 M€ a un banco peruano B. Para ello, primero convertirá los 10 M€ en XRP a través de los «proveedores de liquidez», enviará los XRP en pocos segundos y el banco receptor cambiará estos XRP a través de otros «proveedores de liquidez» por 10 M€ en soles peruanos. Puede que aún existan dificultades relacionadas con la volatilidad del XRP, pero esto es poco probable dada la velocidad de la transacción. Este servicio resulta interesante para los bancos porque permite realizar transacciones mucho más rápidas que las transferencias intermonetarias tradicionales. De esta manera, el valor del token XRP podría apreciarse si el sistema xRapid confirma su éxito a gran escala.
xCurrent
XCurrent es otra solución diseñada para permitir la liquidación instantánea y el seguimiento de pagos transfronterizos entre los miembros de la red Ripple. Pero, a diferencia de xRapid, la solución xCurrent no utiliza la criptomoneda XRP por defecto. Hay que tener en cuenta que xCurrent permite realizar pagos rentables en tiempo real entre instituciones financieras.
Se basa en un sistema de intercambio de activos en forma de IOU (I Owe You). Literalmente significa «te debo», y es simplemente un documento informal que reconoce una deuda. Los IOU pueden enviarse a un coste extremadamente bajo, a tan solo unas pocas fracciones de XRP. Las instituciones financieras también están interesadas en esta solución.
xCurrent incorpora un servicio de mensajería que garantiza la comunicación par a par entre instituciones financieras conectadas a la red de Ripple. Permite intercambiar información sobre costes, tipos de cambio, detalles de pago o el plazo de pago de los fondos. xCurrent también soporta transacciones de criptomonedas.
xVia
Menos esencial, xVia facilita el trabajo de los bancos gracias a una interfaz de programación estandarizada (API) que les permite interactuar en un marco común, sin tener que soportar múltiples integraciones de redes de pago.
Hasta donde sabemos, estos productos se utilizan poco en este momento. Uno de los principales problemas del protocolo es que el XRP, que supuestamente actúa como moneda de cambio entre diferentes interlocutores, no es estable: su cotización fluctúa con respecto al dólar, especialmente. Además, los diversos productos propuestos se basan en la idea de que los clientes solo mantienen XRP durante la transacción y se deshacen de él lo antes posible. Sin embargo, desde entonces han aparecido nuevos protocolos con una moneda estable, como Tether, y están experimentando una adopción mucho más rápida, sin sufrir este problema.
6. Los problemas legales de Ripple
A finales de 2020, la SEC, la autoridad de control de la bolsa de valores de los Estados Unidos, inició una investigación contra Ripple y dos de sus directivos. La acusación principal es que la empresa habría vendido XRP haciendo creer a los inversores que se trataba de una oportunidad de revalorización, cuando en realidad se utiliza muy poco en los productos que ofrece la empresa y, por tanto, corresponde a un valor mobiliario. Sin embargo, un producto de este tipo vendido por una empresa está mucho más regulado que una criptomoneda convencional como el Bitcoin. Podría resultar relativamente difícil para Ripple salir de esta situación.
Este caso judicial debe ser tenido en cuenta por los inversores potenciales, ya que podría tener un impacto en el futuro de Ripple. Un acuerdo entre Ripple y la SEC podría alcanzarse en 2023. Por el momento, la situación y su posible conclusión siguen siendo inciertas, aunque muchos inversores están apostando por una victoria de Ripple. A pesar de esto, el XRP se mantiene sin dificultad entre las 3 mejores criptomonedas.
Conclusión.
XRP es, en definitiva, bastante diferente de la mayoría de criptoactivos en varios aspectos. Se trata de una red altamente centralizada, bajo el control de la empresa que la gestiona. La creación monetaria depende enteramente de la voluntad de sus directivos. El token XRP no tiene otro propósito que la especulación y no es estable, lo cual está lejos de ser ideal para un medio de intercambio. La gran mayoría de los XRP está en poder de unas pocas personas y las autoridades estadounidenses acusan a la compañía de manipulación.
Le sugerimos que mantenga la prudencia a la hora de invertir en XRP. El hecho de que el precio sea bajo comparado con el Bitcoin no quiere decir necesariamente que sea «un buen negocio», porque debemos tener en cuenta la capitalización total que, por supuesto, depende del número de fichas en circulación. «Caveat emptor» es una expresión latina que significa literalmente «que el comprador esté atento». En este caso cobra todo su sentido.